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Confronted with the fashion industry’s serious socio-environmental impact and acknowledging that fast fashion provokes unstable relationships with clothing, accelerating loss of value and early disposal, this article explores those cases in which garments are still valued and attachment is strong. We are interested in identifying the motives behind the bonds that are developed towards cherished pieces of clothing. For this, we have analyzed more than 600 hundred short stories, written by men and women from all over Chile, that justify those garments that remain in their closets for many seasons and reasons. The results allow us to identify a set of attributes and their correlations, enriching the discussion about the relationship between people and dress.

Este artículo explora la relación entre las ecologías estéticas de hogares de distintos sectores socioeconómicos, y su disposición para conservar o descartar objetos. Más específicamente, analiza cómo las prácticas domésticas, el modo en que se produce y las formas en que mantiene el hogar pueden incidir en una mayor o menor propensión hacia formas de vida sustentables. En base a un trabajo etnográfico conducido en hogares de clase socioeconómica alta y baja de la ciudad de Santiago, pudimos distinguir tres dimensiones relevantes: la materialidad, la funcionalidad y la temporalidad. Así, mientras las casas de clase alta se caracterizan por ecologías más bien cerradas y restrictivas, que resisten fuertemente prácticas sustentables, los hogares populares presentan estéticas más abiertas, de temporalidades lineales y espacios multifuncionales que explican en buena medida su propensión hacia la coexistencia de objetos y materiales diversos.

A diferencia de lo que sucede habitualmente en lugares conectados a los flujos del capital en donde la casa constituye un espacio de consumo y tiende a ser un lugar de paso para una gran cantidad de cosas, la vivienda rural destaca por su capacidad de retener las cosas y alterar sus procesos de obsolescencia, fijándolas en un territorio dúctil y receptivo que reconoce y acepta la transformación y el deterioro de la materia.